domingo, 15 de noviembre de 2009

Etapa 1: Somos historia

Nuestra historia

A menudo desconocemos el pasado de nuestra familia, y realmente es una pena, ya que debemos conocer la historia de nuestra familia para comprender la nuestra. Esta podemos saberlo a partir de la tradición familiar.
Debemos tomar conciencia de la tradición familiar, que nos ayuda a comprender el presente que estamos viviendo. La tradición familiar es parte del pasado, y de conocer el pasado se encargan los historiadores, que realizan un trabajo sistemático a partir de determinadas piezas clave como:
  • Testimonios escritos sobre la ética de la época, los personajes,...
  • Testimonios orales que son relatados por las personas que vivieron la época que se está estudiando
  • Testimonios visuales que son pinturas, fotografías, etc...
  • Testimonios arqueológicos como restos materiales, utensilios, edificaciones, etc...

¿Cómo crear un árbol genealógico?

Para crear un árbol genealógico debemos guiarnos de ciertos signos que nos ayudan a comprender el orden de nuestros antepasados.

domingo, 7 de junio de 2009

San Pablo

Pablo o Saulo, era un judío de Jerusalén muy convencido de su fe que fue uno de los más grandes perseguidores de cristianos de su país. Pero un día de camino a Damasco, tuvo una revelación. De repente vio una luz cegadora que le tiró del caballo y que le comenzó a hablar. Desde ese día, Pablo pasó de ser uno de los más grandes perseguidores a un apóstol más.

Inició un largo camino por el Mediterráneo donde se dirigía a todo tipo de personas y les comunicaba la buena noticia. Así, se fueron creando comunidades cristianas a lo largo de todo su camino. Pablo hizo cinco grandes viajes.

Cuando se dirigía a los sitios, iba creando comunidades que iba animando en su camino de regreso. Su misión fue básicamente animar a las comunidades y predicar el evangelio. Fue el autor del libro de Los Hechos de los Apóstoles.

Etapa 9

Los primeros cristianos
La primera comunidad cristiana fue la formada por los Doce Apóstoles. Entre ellos se repartían los ministerios, que eran las tareas que se tenían que llevar a cabo. Estas comunidades fueron creciendo y se fueron nombrando distintos cargos para cada ministerio. Los ministerios eran: el de la Palabra, en el que la persona encargada leía, proclamaba y explicaba la Palabra de Dios contenida en la Biblia. También estaba el ministerio de presidir la comunidad: de esto se encargaba el cabeza de grupo, el líder, que era el encargado de cubrir las necesidades materiales y espirituales de la comunidad.
Más adelante se creó la Iglesia, que tenía una organización interna bien definida: organización, celebraciones y cultosy lugares de reunión y culto. La vida de cada iglesia local se organizaba en torno a un obispo, que era asistido por los presbíteros o sacerdotes o por el diácono. En un primer momento, las ceelebraciones se realizaban en las casas, pero a partir del siglo II, algunas de estas casa se convirtieron en lugares de culto y en el siglo IV se comenzaron a construir basílicas. Sin duda la celebración más importante era la del Bautismo, en la que se le daba la bienvenida a los nuevos cristianos que venían a formar parte de la comunidad. Este sacramento por entoncessólo se llevaba a cabo el día de Pascua. Los cristianos se reunían una vez a la semana, el domingo, para hacer el sacramento de la Eucaristía. Cuando había algún problema en la región, se hacía un concilio regional en el que se reunían todos los obispos de una región.
Pero aunque la Iglesia iba aumentando, había personas que no estaban de acuerdo y que perseguían a los cristianos y les hacían mártires. Normalmente este término va asociado con derramamiento de sangre. Hubieron 10 grandes persecuciones desde comprendidas entre los reinados de Nerón y Diocreciano. Se infligían castigos de diversa índole, sobre todo expropiación de bienes, prisión, destierro, trabajos forzados, torturas, o incluso la muerte.

viernes, 5 de junio de 2009

Etapa 8

El ser humano: algo especial


La vida humana no es un fenómeno biológico más ni debe ser tratada como tal. No por ser biológicamente superior, sino porque tiene conciencia y libertad. La conciencia es la voz interior que nos dice lo que está bien y lo que está mal. La vida humana es un don y hay que saber recibirla, conocerla, cuidarla, promoverla y defenderla.



Debemos actuar a las agresionas contra la vida como la guerra, el terrorismo, etc... y contra sus interrupciones aplicando ciertos principios generales como el de no matarás, más allá de la ley del talión, procurar las mejores condiciones posibles para el desarrollo de la vida humana, ser conscientes del valor de la vida en sí misma, saber que no somos dueños de nuestra vida y que ésta comienza en el momento de la concepcción.

Sabiendo esto, también debemos estar en contra de toda manipulación de la vida humana relacionada con la intervención del hombre en la concepción. la Iglesia rechaza esstas prácticas aplicando algunos principios como el que la ciencia debe estar al servicio de la vida, que no todo lo técnicamente posible es bueno o que la vida humana no puede estar puesta al servicio de algo que no sea ella misma.

martes, 12 de mayo de 2009

Etapa 7

La Libertad

Todos reclamamos que somos personas libres e independientes pero, ¿sabemos realmente lo que es la libertad?

La libertad no es mas que la capacidad de responder de manera adecuada y constructiva a las llamadas que se reciben. Pero esto va mas allá que una simple definición.

Una pieza clave para ser libres es la conciencia. La conciencia es ese lugar interior en el que la persona percibe las llamadas de la vida, las valora y decide darles respuesta.

Para formar la conciencia de una persona hacen falta tener unas normas y valores que nos ayuden a formarnos como personas.

  • Normas: son las reglas que se deben seguir porque determinan cómo se debe hacer algo o cómo debe realizarse. Son necesarias para la vida porque indican por dónde debemos buscar lo bueno y lo valioso.
  • Valor: Son los principios morales, ideológicos o de otro tipo que guían el comportamiento personal. Las normas están al servicio de los valores, que son más importantes.

Para ser libres hay también que caminar hacia el bien. Jesús nos propone tres caminos para alcanzar nuestra meta:

  • Amar a Dios: reconocerlo como padre que ama a todo y a todos y que es digno de toda confianza, tomar su voluntad como orientación básica de la vida.
  • Amar al prójimo: mirarlo siempre como hijo de Dios y hermano, y no como competidor o agresor. Es respetar su dignidad y su libertad, actuar buscando su mayor bien.
  • Amarse a sí mismo: es sentirse hijo amado de Dios, y por lo tanto, llamado a vivir una vida de plenitud.

viernes, 20 de marzo de 2009

Etapa 6

La fe es una relación de confianza entre dos personas, pero yo quiero hablar de la fe católica, sí, sí, esa relación personal que se establece con el propio Jesucristo. La fe no es la creencia en algo, sino en alguien. Para que se dé la fe es necesario establecer una relación personal con él.

La persona que cree en Dios no lo hace porque sí, sino porque ha descubierto que creer en él, Jesucrito, vale la pena. La fe transforma a la persona que cree, es decir, influye en lo que piensa, hace y siente.

Creer en Jesús engloba dos puntos fundamentales
  • Estar con él: seguirle en todo y poner en práctica su mensaje
  • Sentirse enviado a una misión: anunciar a Jesús con nuestra forma de vida y trabajando por el reino de Dios

Un Dios trinitario

En la vida de Jesús nos encontramos con que hay tres grandes protagonistas: Dios, Jesucristo y el Espíritu Santo. Podemos encontrar a Dios de tres maneras:

  1. Jesús de Nazaret, hijo de Dios, amado por él y llenado de fuerza por el Espíritu Santo. Es hijo y pasa por el mundo haciendo el bien, muere y resucita por nosotros
  2. Dios Padre, que envía a su hijo al mundo por una mismión, Jesús le llamaba "Padre". Es el origen de todo, el Creador, envía a Jesús al mundo y lo resucita.
  3. Dios Espíritu, que llena a Jesús con su furza y le conduce. Pone en marcha a la Iglesia en Pentecostés y la conduce a lo largo de la Historia

Etapa 5

Los cuatro evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan, cuentan cómo Jesús desde el comienzo de su vida pública, se rodeó de un grupo de personas para que estuvieran junto a él y le siguieran en su predicación por Palestina

Este grupo de personas son discípulos, que conviven con Jesús y hacen de su palabra su forma de vida. Estas personas constituyen un grupo íntimo de Jesús. Entre las personas que componen este grupo se encuentran mujeres, discapacitados, enfermos y marginados en general.

En un momento determinado de su vida, Jesús escoge a 12 de sus discípulos a los que llama apóstoles (enviados), que son los colaboradores más cercanos a Jesús.

Jesús tenía un grupo bastante distinto a los grupos que por entonces había en la sociedad: entre otras causas porque en su grupo había mujeres, algo muy extraño en la época. Pero a parte de porque había mujeres, el grupo de Jesús era especial porque entre ellos se establece una relación muy intensa, como la de una familia y además en este grupo la autoridad se ejerce, no por el poder, sino por ser auténticos servidores.

Además de vivir una relación con Jesús el grupo se estblece para extender y predicar la Buena Noticia por toda la Tierra.

Pentecostés

Pentecostés es para los judíos una de las tres grandes fiesta de peregrinación de los israelitas al templo de Jerusalén: se celebra la entrega de Las Tablas de la Ley por parte del Señor a Moisés en el monte Sinaí.

En esta fiesta, tras la muerte de Jesús, los discípulos se encontraban reunidos, entonces se produjo la promesa: El Espíritu Santo se derrama sobre los corazones de los discípulos y estos reciben la fuerza necesaria para ser testigos de Jesús. En Pentecostés nace la Iglesia